El 26 de diciembre de 1991 se acabó un mundo como lo conocíamos. La URSS, uno de los países que más determinó la historia del siglo XX, dejó de existir. Con motivo del 30º aniversario de la caída de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, popularmente conocidas por su acrónimo URSS, te traemos una publicación en la que recordamos cómo se procesó esta disolución de la mano del libro El Último Verano de la URSS, publicado el 20 de Febrero de 2021. A través de sus palabras, la médico, traductora, escritora y periodista Sara Gutiérrez nos hace ver, desde el punto de vista más civil y cercano a nosotros posible, todos los cambios que sufrió esta potencia mundial durante los años de su quiebre y disolución. ¡Quédate y sigue leyendo!
LA DISOLUCIÓN DE LA UNIÓN SOVIÉTICA
La disolución de la Unión Soviética (marzo 1990 – diciembre 1992) fue esencialmente la desintegración de las diferentes repúblicas federales que formaban parte de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y del gobierno central. A raíz de esto surgieron 15 Repúblicas independientes de la Unión Soviética, que hoy en día conocemos como: Rusia, Ucrania, Letonia, Estonia, Lituania, Bielorusia, Moldavia, Georgia, Armenia, Azerbaiyán, Turkmenistán, Uzbekistán, Tayikistán, Kirguistán y Kazajistán.
En 1991 la Unión Soviética, que era la superpotencia del bloque socialista, se derrumbó económica y territorialmente debido a las reformas llevadas a cabo por Mijaíl Gorbachov, el octavo y último dirigente de la Unión Soviética, y Secretario General del Partido Comunista desde 1985 hasta 1991. Estas reformas se llevaron a cabo durante la Perestroika, un movimiento político de reforma dentro del Partido Comunista de la Unión Soviética durante la década de 1980. Se basaban en pasar rápidamente de una economía planificada socialista a una economía de mercado libre similar a China, a las cuales se oponía la parte más conservadora del Partido Comunista.
Este rápido intento de transición provocó el derrumbe de toda la industria y agricultura de la URSS, la inflación se disparó y aumentó la pobreza y surgieron protestas sociales con base nacionalista. El quiebre de los estados se aceleró tras el intento de golpe de Estado en agosto de 1991 y fue sellado en el tratado de Belavezha del 8 de diciembre.
CONSECUENCIAS DEL FIN DE LA URSS
El 8 de diciembre de 1991, los presidentes de lo que ahora conocemos como Rusia, Ucrania y Bielorrusia, se reunieron en secreto firmando el Tratado de Belavezha por el que se disolvía la Unión Soviética y se reemplazaba por una unión voluntaria llamada Comunidad de Estados Independientes. El 25 de diciembre de 1991, el presidente de la URSS Gorbachov se reunió con el presidente de Rusia, Borís Yeltsin, y fue obligado a firmar la disolución definitiva de la Unión Soviética. La disolución del Estado socialista más grande del mundo también marcó el fin de la Guerra Fría.
La disolución de la Unión Soviética fue una de las pérdidas territoriales más repentinas y dramáticas de un estado en toda la historia. Además esta disolución tuvo como consecuencia una severa crisis económica y una caída catastrófica de los niveles de vida en los años 1990, siendo aún peor que la Gran Depresión, la profunda crisis económica mundial que afectó Estados Unidos y todas las grandes economías en 1929.
En este emblemático momento de nuestra historia más reciente, hubo una española, Sara Gutiérrez, que vivió aquella experiencia en su propia piel, ya que estuvo viviendo en la popularmente conocida como Unión Soviética desde 1989 hasta 1996. Con su libro nos enseña y deleita a través de una de las mejores aventuras que vivió en aquellos años de estancia en una URSS en descomposición.
RESUMEN DEL LIBRO “EL ÚLTIMO VERANO DE LA URSS” (2021)
La autora del libro y protagonista de esta historia, Sara Gutierrez, nos abre las puertas de esta aventura en la URSS en su prólogo donde nos introduce en los azares que la llevaron a recibir una beca del Ministerio de Educación ruso para su especialización en Oftalmología una vez finalizado su carrera de Medicina.
EL VIAJE DESDE EL MAR BÁLTICO HASTA EL MAR NEGRO
Sara se asentó en la ciudad ucraniana Járkov y compartió residencia con otros becados; entre ellos hizo una amiga uzbeka que, a pesar de que nuestra autora no estaba muy de acuerdo con ello, la acompañaría en un recorrido que le hizo cruzar el país, desde el mar Báltico hasta el mar Negro. Este viaje lo planificó teniendo en cuenta las restricciones que se le aplicaban en su visado como becada extranjera en el país, pues su permiso apenas le permitía salir de la localidad donde trabajaba. Con el afán de evitar problemas, decidió desplazarse usando trenes nocturnos, aprovechando los momentos en los que la vigilancia era mucho menor, ya que cualquier simple denuncia le hubiera supuesto perder su beca y ser devuelta a España tras los hábiles interrogatorios del KGB.
De esta forma se desplazó a Tallin (Estonia), Riga (Latvia), Vilna (Lituania), Lviv, Kiev y Odesa (Ucrania); seis ciudades pertenecientes a cuatro repúblicas diferentes en las que pudo comprobar cómo ese mundo de la hoz y el martillo que recién había conocido, comenzaba a cambiar y a evolucionar hacia algo nuevo y distinto de lo que hasta ese entonces había sido nombrado como URSS. Sara y su acompañante se llegan a encontrar con las primeras barricadas antisoviéticas en Riga, y también se ven envueltas en la gigantesca manifestación independentista de Kiev. Además se le sumaron, sin pretenderlo, militares, profesores, estudiantes, camareros, revisores, conseguidores, víctimas de Chernóbil (este pasado mes de abril se cumplirán 35 años de aquel estallido) y más personajes que convirtieron este viaje en material para una historia casi de novela.
TRAS EL ÚLTIMO VERANO DE LA URSS
Ya de vuelta en España de vacaciones tras el viaje, cuando Sara oyó que habían secuestrado a Gorbachov, fue cuando cayó en que esas barricadas que había visto en Riga no eran ninguna tontería, y que aquella manifestación independentista en Kiev tenía más fondo que ser algo folclórico. También cuando se encontraron con avalanchas de gente en la estación de Vilva intentando salir, no era una casualidad… Todos estos eventos empezaron a tomar cuerpo y forma en la situación política en la que se encontraba, pero nunca llegó a pensar que se iba a acabar la Unión Soviética. Sara llegó a la conclusión de que se acababa la Perestroika o que echarían un lado a Gorbachov y que el régimen se endurecería, pero nunca llegó a pensar que tendría una consecuencias tan grandes como en realidad las tuvo.
ANALISIS DEL LIBRO: REALISMO Y FICCIÓN
Algo que nos engancha del libro es que mientras la autora nos narra su viaje, vemos como se van intercalando escenas de la vida cotidiana que se vivía durante los dos últimos años de la URSS. Pero es en el prólogo del libro donde podemos encontrar la parte real e histórica de la época en la que transcurre la narración, junto a unas “pruebas”, como ella las llama, como fotos, cupones para alimentos, su carnet de médico y más testimonios físicos de su viaje.
En una entrevista Sara nos cuenta que no todo el libro es totalmente fiel a los acontecimientos ya que se mezclan escenas que ocurrieron años más adelante en forma de flashbacks. Pero también dice que cuando más fiel es al viaje es cuando se refiere a las ciudades, los días y los trayectos, el espíritu de su compañera de viaje, que al final se ganó su cariño, además de los eventos históricos que se representan. Sin duda, algo que sus lectores aprecian es que al contar sus vivencias lo hace sin imponer ningún punto de vista ideológico.
EL VIAJE ILUSTRADO
Algo que es importante comentar es que este libro está ilustrado, no solamente la portada, sino también en su interior por Pedro Arjona, un famoso dibujante de historietas español que es conocido por ser miembro del colectivo El Cubri. Arjona con sus ilustraciones nos da una perspectiva visual de las escenas y momentos más inolvidables del libro con una estética que engrandece muchísimo la historia narrada.
A través de este libro podemos apreciar la tensión que empieza a aflorar en lo que ahora sabemos que fue el último verano de la URSS. Lo que era un momento aparentemente normal se convierte escenario de un viaje de una doctora y escritora española. Un pedazo de memoria personal pero también de una parte de la historia que no podemos olvidar.
¡Esperemos que te haya gustado nuestra publicación! ¿Te ha llamado la atención algún dato en particular? ¿Leerías el libro de Sara Gutiérrez? Si pudieras elegir, ¿de qué momento histórico te gustaría haber sido testigo?
Si te interesa Rusia o quieres saber más sobre este país, ¡descubre más en nuestro post sobre el Carnaval de la Primavera en Rusia!
