EL CÓDIGO SAMURÁI Y LAS MUJERES SAMURÁI

En este artículo os vamos a hablar de los famosos samuráis y de las no tan conocidas mujeres guerreras. La historia de estos hombres y mujeres es fascinante, llena de conflictos, épocas de esplendor y épocas más oscuras. En este articulo os enseñaremos todo lo que hay que saber sobre estos guerreros.

Mujeres Samurái (fuente)

HISTORIA DE LOS SAMURAIS

​Sus orígenes como clase guerrera se remontan al siglo X, aunque ya en la época Kofun (250 – 530 d.C) se observó en las tumbas a personas con armamento militar y se los tiene por los antepasados directos de los samuráis.

Aunque en la actualidad y en parte de su historia estos se centraron en la espada en sus comienzos estos estaban especializados en el uso del caballo y el arco.

Prueba de esto fue que en el año 400 el reino coreano de Paekche pidió ayuda a los japoneses, los cuales perdieron contra la caballería del reino de Koguryo. Los japoneses aprendieron la importancia de la caballería y cuando fueron nuevamente a ayudar a Paekche en el 553, el contingente japonés estaba formado por soldados a caballo y arqueros.

En el 774 los guerreros japoneses volvieron a tener un papel destacado cuando el estado de Yamato, el germen del Japón actual, emprendió una guerra contra los emishi, los bárbaros del norte del archipiélago.

Los samuráis consiguieron finalmente la victoria, aumentando el territorio de lo que hoy sería Japón. Un siglo después ya tendrían conformada totalmente su imagen, con el uso de arcos largos y espadas curvadas, las katanas.

Katana Samurái (fuente)

Fue durante el siglo IX cuando se les dio el nombre de samuráis, “aquellos que sirven”, dentro de un contexto puramente militar. En este periodo convulso de la historia japonesa el emperador dio más poderes a los gobernadores locales para que reclutaran tropas, por lo que aumentó el número de guerreros.

Tras diversos enfrentamientos entre varios clanes guerreros de Japón, donde destacó el clan Minamoto, ocurrió en el siglo XI la guerra Gempei, en la cual se enfrentaron las fuerzas de los clanes Minamoto y Taira. Esta guerra esta narrada en el famoso Heike Monogatari.

En esta guerra el señor feudal, también llamado daimio, Minamoto no Yoritomo se proclamó shogun, título que hasta ahora era temporal. Con esto se establecía el shogunato, que hizo que los samuráis rigieran de facto el país durante más de 700 años, siendo el emperador una mera figura simbólica y un espectador sin poder real.

Tras otra nueva guerra en el siglo XIV, en la cual el clan Hojo quiso hacerse con el poder y se estableció el shogunato Ashikaga, llegamos a la guerra más importante librada por los samuráis, en la cual se crearían los mitos y leyendas que nos han llegado hasta la actualidad.

Período Muromachi (fuente)

SENGOKU JIDAI

Hablamos del Sengoku Jidai, el periodo de los estados en guerra, entre 1467 y 1568. En este periodo el shogunato perdió todo su poder y cada uno de los daimios se levanto en armas contra sus vecinos.

Como dato curioso mucho de estos clanes tenían en su escudo, llamado mon, una o varias comas, llamadas tomoe, las cuales también aparecen en símbolos coreanos.

Esta situación duró hasta que Oda Nobunaga, del clan Oda, comenzó a dominar a la mayoría de los demás clanes. Este daimio fue importante porque destituyó al shogunato Ashikaga, empezando el periodo Azuchi-Momoyama, que va desde el año 1568 hasta el 1603.

Este daimio también fue importante porque introdujo a los ashigaru, guerreros campesinos con menos dinero, destreza y armamentos que los samuráis, por lo que se convirtieron en un rival y en un peligro para estos, puestos que eran más baratos de mantener.

También se introdujo las armas de fuego usadas por ashigarus, las cuales iban en contra de los ideales samuráis al no necesitas de destreza para usarlas y al no ser un arma de cuerpo a cuerpo, como puede ser la espada larga tachi o la naginata.

Estas armas de fuego fueron muy útiles para Nobunaga, como se demostró en la batalla de Nagashino, donde unos simples ashigaru derrotaron a la famosa caballería samurái del clan Takeda.

Clan Takeda (fuente)

El sueño de Nobunaga no se cumplió al ser traicionado y obligado a realizar sepukku, el harakiri. A este gran daimio le siguió Totoyomi Hideyoshi, el cual conquistó el país y lanzó dos invasiones fallidas a Corea, en las cuales los samuráis se destacaron por su ferocidad, crueldad y superioridad militar.

Hideyoshi también creó la distinción de clases entre campesinos y samuráis, dándole más poder a estos últimos, lo cual acarreó problemas en los siglos venideros.

Tras la muerte de Hideyoshi le sustituyó como líder de Japón Tokugawa Ieyasu, el cual tras la batalla de Sekigahara en el año 1603 consiguió dominar todo el país nipón y proclamar el shogunato Tokugawa, que duraría hasta la Restauración Meiji del siglo XIX.

Desde el establecimiento del nuevo shogunato se intentó degradar el estatus social de los samuráis. A lo largo de los tres siglos del régimen Tokugawa a los samuráis se les prohibió hacer duelos entre sí, practicar artes marciales, se les obligó a convertirse en campesinos o a ser vasallo directo de un señor feudal, lo cual era complicado de conseguir.

Batalla de Sekigahara (fuente)

Esto hizo que muchos samuráis quedaran sin señor pero que tampoco quisieran ser campesinos, por lo que se convirtieron en ronin, samuráis sin señor. Estos se dedicaron al contrabando y al robo, lo cual dio lugar a que cada daimio cerrara las fronteras para que no pasasen ronins.

La figura del ronin nos ha llegado a la actualidad como un samurái errante, virtuoso y fiel a sus valores, el cual aguanta todos los males con tal de mantener su vida integra.

La historia de los samuráis termina con la Revolución Meiji, mediante la cual el shogunato fue abolido y el país modernizado, quedando desfasados las técnicas de combate cuerpo a cuerpo, y los ideales de nobleza samuráis, lo cuales obstaculizaban el incipiente imperialismo japonés, de corte europeo.

Revolución Meiji (fuente)

EL CÓDIGO SAMURÁI

Los valores de los que hablamos se recogen en el Bushido, el camino del samurai. No es una serie de reglas que deban cumplir, sino unos valores, principios y reglas morales que los samurais deben seguir hasta la muerte.

Estos principios son siete:

  • Justicia o Rectitud, Gi (義): se trata de ser honrado, actuar según lo que uno mismo considere justicia y actuar siempre correctamente
  • Coraje, Yu (勇): El samurái debe ser valiente, heroico, lanzarse a lo peligroso sin pensar en las consecuencias, pero a su vez no ser irreflexivo y compulsivo.
  • Compasion, Jin (仁): El guerrero debe ser compasivo con los demás, ayudar a sus compañeros siempre que pueda, incluso cuando no se puede.
  • Respeto o cortesía, Rei (礼): Los samuráis no necesitan mostrar su fuerza constantemente, no se trata solo de eso. Por ello son respetuosos con sus enemigos.
  • Honestidad, Makoto (誠): El guerrero siempre cumple su palabra y no promete nada si sabe que no va a poder cumplirlo.
  • Honor, Meiyo (名誉): El samurái es una persona inmaculada, no puede existir deshonor en su vida y si la hay debe cometer seppuku para resarcirse.
  • Lealtad, Chuungi (忠義): Como el samurái realiza todo lo que promete, si se declara leal a cualquier persona lo será leal hasta la muerte.
Las virtudes samurái (fuente)

MUJERES SAMURÁIS

Las mujeres samuráis, también llamadas onna bugeisha, son un pequeño grupo de mujeres, generalmente esposas e hijas de samuráis pertenecientes a la clase bushi, que salieron del rol típico que tenían asignado por su género y decidieron formar parte de las actividades bélicas de este Japón feudal.

No solían combatir en grandes campañas, por lo que estaban más dedicadas a un papel defensivo. Eran entrenadas para defender a sus familias, sus hogares y su honor.

A diferencia de los samuráis masculinos, que eran reconocidos en gran parte por el uso de katanas, las onna bugeisha utilizaban de forma más habitual otra arma llamada naginata. Era una especie de lanza, pero en lugar de tener una punta convencional poseía una hoja afilada y curva que la dotaba de una gran versatilidad a la hora de luchar.

Era preferida por ellas ya que la longitud de la misma les permitía compensar la mayor fuerza física de sus oponentes masculinos, manteniendo una cierta distancia con ellos.

Tan común era su uso por las mujeres samuráis que se convirtió en indispensable para su lucha y aún hoy es icónica esta imagen de una guerrera blandiendo una naginata.

Mujer samurái (fuente)

Nakano Takeko fue una onna bugeisha que luchó con el shogunato en la batalla de Aizu, liderando su propio ejército femenino. Es destacable su contundencia en la guerra, ya que consiguió que el bando contrario tuviera que replantearse su estrategia.

Desgraciadamente Takeko recibió una herida de muerte provocada por una bala. En sus últimos momentos, pidió a su hermana que le realizara el seppuku y que le cortara la cabeza para que los enemigos no se la llevasen como trofeo.

Mujer samurái (fuente)

¿Os ha resultado interesante este paseo por la historia de los guerreros y guerreras japoneses? Si tienes algo que contarnos, estaremos esperando tu comentario.

Y si te gustan las historias sobre Japón, ¡no te puedes perder nuestro post sobre el día de la contemplación de la Luna!

¡Hasta la próxima!

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