¿Recordáis ese osito de peluche amarillo con una camiseta de manga corta roja? Sí, el mismo Winnie the Pooh. ¿Os sorprendería si os contáramos que este famoso dibujo animado sigue en muchos aspectos la corriente del Taoísmo?
El Taoísmo para quienes aún no lo sepáis es una de las más importantes corrientes religiosas y filosóficas del mundo oriental. Surgió en China como una postura casi contraria al modelo confuciano establecido.
¿En que consiste este modelo de pensamiento? Como su nombre indica, es el Tao el principio que conforma la realidad, de dónde emana todo lo existente, el camino que los individuos deben seguir, entre muchas otras acepciones.
Es algo muy difícil de explicar, pues el Tao lo es todo y a la vez no es nada. Cuando los propios filósofos tratan de dar a conocer el concepto, lo hacen de tal manera para que no puedas visualizarlo como algo concreto. Es el orden natural que fluye y, según los taoístas, con el que nos debemos dejar fluir.
Podríamos decir que sus enseñanzas están esencialmente recogidas en el escrito “Dào Dé Jing”, atribuido al famoso pensador Lao-Tse; taoísta que supuestamente fue contemporáneo de Confucio.
Siendo Winnie the Pooh una invención occidental es complicado convencerse de que haya significado taoísta en la obra. Sin embargo, el conocimiento del Taoísmo sí que llegó a nuestro mundo. Tarde, a mediados del siglo XIX, pero llegó.
Fue en un momento en el que se estaba buscando una alternativa al movimiento racional impuesto por antiguos filósofos como Platón y Descartes. La idea de contemplar la filosofía oriental conllevaba ciertas barreras como el idioma; las enseñanzas del taoísmo de por sí nunca fueron claras, de modo que las interpretaciones lo eran aún menos.
En el siglo XX finalmente el estudio del Taoísmo comenzó a ser posible. Muchos escritores pudieron interiorizar la esencia de este y por tanto, compartirlo con esta parte del mundo. Teniendo nuestro punto de vista como referencia, es obvio que los modelos de pensamiento son muy diferentes. Saber esto nos ha ayudado a comprender las diferencias culturales que nos separan y al mismo tiempo nos complementan.
Mientras que en nuestra cultura las ideologías proponían cambios y, generalmente, acabar con las costumbres para crear algo nuevo, en Asia siempre se ha mantenido un alto respeto a la tradición. Avanzar sin olvidar nuestros orígenes y antepasados.
Dentro de la propia religión Taoísta, los occidentales y los asiáticos tienen una opinión diferente sobre donde apuntar el foco; los seguidores occidentales prestan mayor atención al asunto de la inmortalidad corpórea mientras que los seguidores de Asia Oriental sostienen que es la experiencia del Tao lo verdaderamente importante.
Benjamin Hoff es el protagonista de este artículo, pues fue quien tuvo la original y curiosa idea de aplicar esta perspectiva al osito de peluche que hemos mencionado al principio, naciendo así el libro titulado “El Tao de Pooh”.
Hoff es un escritor estadounidense, de actualmente 72 años, que dedicó parte de su vida al estudio del Asia Oriental, traduciendo también algunos fragmentos de las obras más importantes de la corriente taoísta.
Decidió utilizar al personaje de Winnie the Pooh para facilitar a nuestro lado cultural la comprensión de las filosofías asiáticas, pues no solo hace referencia al taoísmo sino que menciona y hace referencia al confucianismo. Se dice que la mejor manera de explicar algo completamente nuevo es con ejemplos más familiares. Pues este libro es uno de esos ejemplos.
Lo primero es que compara las tres grandes filosofías asiáticas; mientras que en el confucianismo y en el budismo se presenta a la vida como la peor parte de la “existencia” (ambos consideran que la muerte es el paso a una situación mejor, de sabiduría y libre de sufrimiento), el taoísmo es la que decide apreciar la vida y su flujo.
En el segundo capítulo, el autor nos compara a Conejo (uno de los personajes de esta obra) con Pooh; Mientras que Conejo vive meditando todos sus actos, haciendo uso continuo de su inteligencia (Confucianismo), Pooh se deja llevar por las situaciones y el arte de adaptarse e improvisar es el que le mantiene feliz (Taoísmo).
A continuación se nos presenta a Buho, el amor por la sabiduría y orgulloso por sus conocimientos adquiridos por los estudios. Este capítulo trata de enseñarnos que el deseo de alcanzar el saber es innecesario pues la propia experiencia es la que “otorga” el entendimiento.
En otro de los capítulos se hace literalmente referencia al estilo de vida que sigue nuestro oso de peluche; El no hacer nada frente a las circunstancias, la no acción (este principio es llamado Wu-Wei en el taoísmo) y la espontaneidad (llamada Zi-Ran). En la gran mayoría de escenas de la obra, vemos a Pooh dejándose llevar por las adversidades, esperando que el propio flujo de la vida dé de nuevo estabilidad.
Winnie the Pooh es una figura completamente opuesta al estilo de vida del hombre moderno; no se preocupa por el tiempo, no se preocupa por el progreso individual. El autor quiere mostrarnos a Pooh como una figura ejemplar a la que seguir para poder verdaderamente disfrutar de la vida.
Para finalizar su libro, Hoff intenta dirigirse directamente al lector. Intenta darnos otro punto de vista sobre la vida, invitándonos a dejar a un lado nuestra perspectiva científica de la vida; nuestra obsesión por saberlo todo nos aleja de la verdadera comprensión de todo. No saber nada es a su vez entenderlo todo.
A día de hoy y desde siempre, el ser humano ha tenido la necesidad de creer en algo para sentirse completamente lleno. Sea en un Dios, sea en varios Dioses, sea en la ciencia. Muchas guerras de la historia han sido consecuencia de una confrontación entre ideologías.
El Taoísmo propone una visión diferente sobre este tipo de creencias. Una visión que consiste en apreciar lo que te rodea. En no manipular las circunstancias. En no adelantar acontecimientos. La naturaleza es la fuerza más poderosa de todas. El equilibrio continuo.
Una oruga, para avanzar, primero recoge y retrocede su cuerpo.
¿Que opinas sobre está visión filosófica y religiosa? ¿Crees también que Winnie The Pooh es un perfecto ejemplo de la actitud taoísta frente a la vida? ¿Cual es la corriente de pensamiento asiática que más te interesa?