Todos los países cuentan con héroes nacionales, quienes llevaron a cabo grandes hazañas que todavía son recordadas por sus compatriotas. En Corea, uno de estos héroes es Yi Sun Shin. ¿Quieres conocer más sobre él? En este post podrás leer datos interesantes sobre su vida y las hazañas que le convirtieron en una figura reconocida en Corea.
Yi Sun Shin nació el 28 de abril de 1545 en Seúl, actual capital de Corea del Sur. Fue un reconocido almirante de la flota coreana, que destacó por sus victorias militares durante las invasiones japonesas en el año 1590, conocidas bajo el nombre de la Guerra Imjin.
Procedía de una familia de yangban (clase gobernante tradicional o nobleza coreana), siendo su abuelo, Yi Baeg-nok, un político que se retiró de su puesto tras las purgas de los literatos (escritores y autores literarios) realizadas en 1519. A su vez, su padre desistió de realizar los exámenes de acceso al servicio público por este mismo motivo, unido también a su desinterés y desilusión por los asuntos políticos.
Sin embargo, Yi Sun Shin decidió presentarse el año 1572 al examen para acceder al ejército, pero suspendió tras caerse en la prueba de caballo y romperse una pierna. A pesar de ello, su gran habilidad y precisión en el manejo del arco sorprendieron a los examinadores.
Fue cuatro años después, en 1576, cuando consiguió aprobar el examen con 32 años de edad y fue destinado a los asentamientos situados en la frontera norte, donde tuvo que luchar frente a los Jurchen, un grupo de guerreros del pueblo de Manchuria, situado en la frontera oriental entre China y Rusia.
Su gran pericia despertó la envidia de sus compañeros de filas, siendo incluso acusado falsamente de deserción en una trama urdida por el general Yi Il, lo que provocó que Yi Sun Shin fuera encarcelado, torturado y despojado de su rango. Una vez salió de prisión, pudo volver a realistarse como soldado raso, posteriormente ascendido poco después de su reincorporación. Desde este punto consiguió reconstruir su carrera, ascendiendo en la pirámide de mando a puestos de cada vez mayor responsabilidad.
Los principales motivos por los que es recordado tienen su contexto en las invasiones por parte del ejército japonés de la década de 1590. Durante esta etapa, consiguió hasta 23 victorias en batallas navales, sin sufrir ninguna derrota.
Las claves que le llevaron a conseguir ese éxito militar residen en su exhaustiva y dedicada preparación antes de las batallas, tanto en la gestión de sus soldados, suministros y arsenal bélico, como en la organización del campo de batalla, contando con información previa detallada de las costas de Corea, que le permitía planear los enfrentamientos de manera que pudiera aprovechar las ventajas que el terreno ofrecía.
Otra característica por la que Yi Sun Shin destacaba era su gran capacidad de liderazgo y lealtad hacia sus hombres, manteniendo su moral en los momentos más complicados, a pesar de las noticias sobre las numerosas derrotas que el ejército coreano estaba sufriendo en otros lugares del país.
Por otro lado, también se destaca el uso de un barco que fue determinante durante sus campañas militares. Se trata del Geobukseon (거북선) o barco tortuga, rediseñado por orden de Yi Sun Shin a partir de modelos preexistentes, siendo la primera unidad lanzada el 27 de marzo de 1592. Este modelo de galera consta de una armadura provista de pinchos en el techo de la embarcación la cual cumplía dos funciones: por una parte, protegía a la tripulación de los ataques enemigos y, por otra, impedía el abordaje de los adversarios. Era propulsado tanto por vela como por los remeros que se encontraban en el interior, y tenía en la parte delantera una cabeza de dragón que expulsaba humo para dificultar la visibilidad del enemigo. En cuanto a su potencia de fuego, contaba con 11 cañones por banda, con dos en la popa y uno en la proa. Además, contaba con agujeros en los lados por los que podían ser disparadas flechas, pistolas y fuego de mortero, lo que aumentaba su versatilidad en el combate.
Tras numerosas batallas libradas, su muerte se produjo el 16 de diciembre de 1598 durante la contienda de Noryang. Durante el transcurso de ésta, un proyectil de arcabuz alcanzó a Yi de forma fatal, causándole la muerte poco después. Tuvo tiempo para pedir a su sobrino, que se encontraba a bordo, que no informara a sus hombres de su muerte, y que vistiera su armadura, para mantener así la moral de sus soldados. Tras la batalla, fue enterrado en Asan, Corea del Sur, junto a su padre. Se construyeron santuarios en su memoria a lo largo de todo el territorio.
Su legado queda tanto en la memoria de los coreanos como en la cultura popular, películas, series y obras literarias dedicadas a su persona. También pueden observarse estatuas erigidas en su honor, como la que se encuentra en Sejongno. La película El Almirante cuenta la historia de este personaje militar en la batalla de Myeongryang, en la que con sólo 13 barcos venció a la armada japonesa la cual disponía de 300 barcos.
Ahora que conoces algo más sobre uno de los héroes nacionales más importantes de Corea, ¿qué te parece su historia? ¡Cuéntanoslo en los comentarios, queremos saber tu opinión!
