En Tailandia es muy común ver en las entradas o partes traseras de las casas unas pequeñas construcciones llamadas “Casas de Espíritus” o “San Phra Phum”. Estas son parecidas a altares o pequeños santuarios de gran importancia a cultural, aunque también se utilizan en otros países asiáticos como Birmania o Camboya. Aun así, en este post nos centraremos en las Casas de Espíritus en Tailandia, ¡esperamos que os guste!
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¡Comenzamos!
CASAS DE ESPÍRITUS EN TAILANDIA, ¿QUÉ SON?
Para empezar, los tailandeses creen que los espíritus y los fantasmas están en todas partes, incluso en los barcos, árboles, coches y, por supuesto, en las casas. Es por esto que comenzaron con la tradición de las casas de espíritus.
En el país se cree que estas casas contienen espíritus protectores, generalmente de los antepasados, capaces de cuidar las casas y sus habitantes. A cambio de esa protección, las personas construyen estos “altares” de manera que puedan proporcionarles a los espíritus un lugar cómodo y acogedor en donde vivir y descansar. Por lo tanto, la teoría asegura que, si los tratas bien, es probable que brinden protección, alejen las malas energías del hogar y atraigan la buena fortuna, entre otros.
Los tailandeses creen que, al proveer casa y cobijo a estos espíritus, la armonía y la serenidad “descenderán” sobre la vivienda, negocio o edificio donde se haya posicionado esta casita.
Por lo general, son teorías supersticiosas de los tailandeses, pero como ya hemos mencionado antes, también son utilizadas para su bienestar en otros países del continente asiático, como Birmania, Camboya o Laos. Y es que no solo se centran en la construcción de estos en colores vivos (rojos, verdes, blancos, azules…), también en su emplazamiento. Así, deben ubicarse en la entrada o parte trasera de la casa, de manera que esté mirando hacia el norte. Es decir, no importa su posición en el hogar, lo importante es que estén orientadas hacia el norte.
A pesar de que hay muchísimas tiendas en el país donde puedes comprar estas casas de espíritus, no cualquiera puede colocarla en su lugar correspondiente. Se debe de seguir un ritual de consagración y tiene que ser dirigido por un monje budista. Este monje será el que escoja el lugar para consagrar el santuario.
¿Cómo se lleva a cabo este ritual? Pues el monje se encargará de realizar cantos ceremoniales mientras clava las estacas que sustentarán la casa. Cuando todo está listo, es él quien invita a los espíritus protectores a entrar. Pero para ello, el monje debe esperar al momento justo, que se determinará mediante unos determinados cálculos en base al calendario lunar para que así corresponda con una fecha favorable. Finalmente, las personas presentes muestran sus respetos a los espíritus y les piden protección para la propiedad y sus moradores.
Además, estas casas de espíritus tienen un mantenimiento. Una vez instaladas, debe de hacerse un cuidado y mantenimiento diario. Por ejemplo, el dueño de la propiedad debe hacer ofrendas cada día, preferiblemente por las mañanas. Entre las ofrendas más comunes está la comida, bebida, guirnaldas de flores e inciensos, que se depositarán en una pequeña mesa delante de la casa del espíritu. La finalidad de estas ofrendas es la que apaciguar a los espíritus y a aquellas fuerzas sobrenaturales que puedan inferir en nuestro destino, para que nos favorezcan.
Como dato curioso, cuando una casa se derriba, se vende o se abandona porque se considera que da mala suerte, lo que se suele hacer es “tirar” su casa de espíritus. De igual manera, cuando se compra una propiedad de segunda mano, que ya cuenta con su propia casa, lo más común es deshacerse de la vieja y colocar una nueva.
¿CUÁL ES LA EXPLICACIÓN RELIGIOSA?
¿De dónde viene esta tradición? Resulta que la mayoría de los tailandeses practican el budismo theravada y está muy relacionado con la espiritualidad. Sin embargo, la religiosidad en Tailandia es bastante compleja ya que integra elementos de otras tradiciones religiosas. Las propias casas de espíritus son un claro ejemplo de esto. Su origen se remonta a cultos animistas, según los cuales estas casas son un medio para cultivar una relación armónica con la naturaleza. Mediante las ofrendas, se intenta tener algún tipo de “control” sobre las fuerzas de la naturaleza que condicionan nuestras vidas, creando así un circuito de interdependencia que fluye constantemente en busca del equilibrio.
A pesar de formar parte de otra tradición religiosa, y como mencionamos anteriormente, la religiosidad en el país está compuesta por elementos de diversas tradiciones. Es por esto que el budismo ha aceptado estas casas de espíritus. Además, se han convertido en un claro exponente de la mezcla de culturas y religiosas en Tailandia y denotan la principal característica de la religiosidad en el lugar: la tolerancia hacia el hecho religioso.
Como habéis podido comprobar, Tailandia no deja nunca de sorprendernos. Las casas de espíritus son un ejemplo más de las sorprendentes costumbres tailandesas de un país lleno de contrastes que no dejan a nadie indiferente. ¡Y esperamos que a ti tampoco!
Hasta aquí el post de hoy, esperamos que lo hayas disfrutado. ¿Habías oído hablar de esta curiosa tradición tailandesa? ¿Las habías visto en persona o, por el contrario, en series y películas del país? ¡Déjanos saber en los comentarios qué te ha parecido y si lo conocías de antes! ¡Te leemos!
